Cinco razones para la internacionalización de las empresas de ayuda sociosanitaria

La conquista de nuevos mercados es para las empresas españolas lo más parecido a un trampolín desde el que saltar hacia un futuro más prometedor. Para el sector sociosanitaro, un proceso de internacionalización les plantea, además, un reto aún mayor que el de crecer económicamente. Y es la posibilidad de exportar a otros países un modelo de ayuda domiciliaria que ha supuesto mejorar la calidad de vida de millones de personas dependientes.

maleta

Aunque de manera más tímida que otras compañías de la rama sanitaria (como clínicas especializadas, residencias para mayores o proveedores de material hospitalario), las empresas de atención a la dependencia empiezan a salir al exterior, viendo sobre todo en el mercado latinoamericano un campo de trabajo muy amplio al compartir, no sólo idioma, sino también valores relacionados con la familia y el cuidado de los mayores.

Destaca, por ejemplo, el proyecto de teleasistencia que Eulen está desarrollando en el municipio chileno de Ñuñoa, donde por primera vez en la historia de Chile se está implantando este servicio, que ya atiende a más de 1.500 usuarios y que prevé expandirse a otras ciudades. Eulen, además, ha presentado su programa ‘Pulsos Salud’, que combina telemedicina y teleasistencia y que se ejecuta como prueba piloto en México.

manos_de_ancianos_edited1Cruz Roja también está trabajando en esta línea en Uruguay, la Fundación Rey Ardid hace lo propio en República Dominicana, y en el ámbito privado cabe destacar a la madrileña Cognitiv@, que prevé implantar en Portugal y Suiza centros especializados en la ayuda a pacientes con Alzhéimer.

“Más de 200 empresas andaluzas de economía social dieron el salto a otros países el año pasado.”

Las cifras avalan también esta tendencia. Según datos de la Agencia Andaluza de Promoción Exterior (EXTENDA), más de 200 empresas de economía social se internacionalizaron el año pasado, lo que supone en Andalucía un aumento del 18.6% respecto a 2010.

Pero para quienes se siguen preguntando si es hora de preparar las maletas, planteamos cinco razones por las que emprender la aventura de exportar el modelo ‘made in Spain’.

1
Saturación del mercado doméstico. El sector de ayuda domiciliaria ha llegado a la madurez en nuestro país, nunca mejor dicho. De ahí que sea interesante la apertura de nuevos mercados en países donde empieza a profesionalizarse este servicio.

2
“No pongas todos los huevos en la misma cesta”. Esta frase dará mejores resultados que la de ‘más vale malo conocido que buen por conocer’. La diversificación del riesgo previene más situaciones negativas que apostar todo a una misma carta.

3
‘Quien tuvo, retuvo’. Hay muchos profesionales de origen latinoamericano que durante años han trabajado en España en el sector, adquiriendo una experiencia valiosísima que ahora podrán trasladar en sus países de la mano de empresas españolas.

4
Más clientes, más negocio. El salto a mercados con mayor número de habitantes incrementa proporcionalmente las posibilidades de crecer.

5
Experiencia- Prestigio- Satisfacción. Operar en diferentes países plantea retos, inquietudes y adaptación al medio, pero también la satisfacción de satisfacer las necesidades de personas dependientes que precisan un alto nivel de ayuda. Y eso deriva, a su vez, en mayor experiencia y en prestigio y notoriedad, añadiendo un valor diferencial respecto a la competencia

Grupo Trevenque, empresa tecnológica con más de 20 años de experiencia, ayuda a las empresas en su proceso de internacionalización por medio de facilitarte su trabajo de ayuda domiciliaria a través de sistemas de gestión integral como GESAD y de un proceso personalizado de asesoramiento y tutorización.